Mientras hay vida hay esperanza

Visto lo visto en el primer tiempo con un 75% de posesión de balón para el Valencia, haber terminado con tan solo 1-0, es casi un regalo de reyes, desde luego no el que yo ansiaba, pero regalo al fin y al cabo.

Regalo el que nuestra defensa le ha ofrecido al rival, el balón pasa hasta por tres jugadores nuestros sin que ninguno de ellos, quiera, pueda o le diera la gana de despejar y claro el listo de turno en este caso Jonás, coge el regalo que para eso es la noche de reyes y lo envía al fondo de las redes.

Sigo sin saber cuantos minutos y partidos hay que darle a Rakitic para que coja la forma, cuantos a Trocho que va en clara decadencia, y mientras, Campaña o sentado o calentando en la banda.

En la segunda parte parece que el Sevilla sale más entonado  y durante media hora ronda el área del rival pero este equipo ahora mismo tiene poco, muy poco gol, aunque es justo decir que ha habido momentos en los que se podía pensar que los de Nervión estaban cerca de empatar, y otros en los que se olía el 0-2.

Grande D. Andrés Palop,  que ha salvado al equipo al menos en tres ocasiones, para mi el mejor del partido.

Increíblemente Marcelino le ha dado minutos a Luna en un cambio extraño, ya que salió Trocho y entro el de Pedrera, y según mi opinión fueron los mejores minutos del Sevilla. Más increíble aún es que sustituyó a Negredo que ha vuelto a las andadas, por un ilusionado Luis Alberto que tuvo una ocasión en sus botas pero remató al muñeco, cierto es que al menos alguien tiró a puerta.

La remontada es posible en nuestra Bombonera, pero el equipo sigue teniendo muchísimo que mejorar, y empezar a crear peligro de verdad, porque cuando Kanouté no está para sacarnos las castañas del fuego, que difícil se hace ver una jugada que lleve peligro de verdad.

Lo dejo por hoy, porque aunque los Reyes no me han traído el regalo que más ilusión me hacía, espero que algo me traigan, al fin y al cabo en esta vida no todo es fútbol.

¡Qué tengan una buena noche de Reyes!